FÚTBOL / LIGA DE NACIONES FEMENINA
Athénée y Aitana se encuentran en el banquillo, pero entran solas en el campamento de Lucía García. Con el grupo encontrado, Esther se prepara para entrar.
El extremo del Real Madrid y Montse Tomé ofrecen versiones contradictorias del suceso
La selección española siguió la clasificación para la fase final de la Liga de Naciones durante el partido contra Italia. Una vez perseguido el objetivo, los nuevos campeones del mundo tienen una imagen impropia del equipamiento profesional.
Durante el partido ante Suiza del pasado 31 de octubre, un error de la RFEF en el envío del convocante impidió que el encuentro se disputara con cuatro jugadores. En Pontevedra, el conjunto español disputó el segundo partido con un jugador más débil sin recibir la expulsión. No saltan al terreno de juego ni Aitana ni Athenea, pero cuando la colegiada indicó el inicio del segundo tiempo, se encuentra sola en el campamento de Lucía García. Esther se prepara para entrar al banquillo. Inusual.
El Athénée du Château entró tras la fiesta del acontecimiento y fue condenado por no poder permitirlo. “Los cambios que dijimos para usar charla deberían haber causado un error de cálculo. Sabremos que podremos banquillorlo.
Sin embargo, Montse Tomé planteó todo lo contrario de su jugador y propuso una versión contradictoria con argumento para el extremo del Real Madrid. La selección aseguró que el cambio de Aitana tuvo un carácter impredecible: «En el proceso de investigación tenemos el cambio de Atenas por Lucía, y cuando vamos a empezar la segunda parte de Aitana nuestra opinión con poco tiempo es expectativa de que no podemos continuar. «No teníamos tiempo para que Esther se divirtiera, así que comenzamos el segundo juego con una jugadora más pequeña».
Por su parte, Tere Abelleira aseguró que los jugadores se divirtieron en el campamento con un menos. “Fue todo muy rápido, entró Lucía y los dos cuenta que fataba a otra compañera. Realmente no hemos oído que ésta sea la fiesta. No, eso no es cierto, pero queremos llegar al nivel de excelencia y no lo podemos permitir”, afirmó Pontevedresa.
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